Los terrenos donde se construyó el campo de prisioneros Stalag Luft III, fue seleccionado debido a que su suelo arenoso hacía difícil un posible escape de los prisioneros a través de un túnel.

De los 73 prisioneros que fueron recapturados después del famoso “Gran Escape”, en el 2015, murió el penúltimo sobreviviente, el piloto australiano Paul Royle. Sólo vive el británico Dick Churchill, de quien se dice se salvó de ser fusilado gracias a su ilustre apellido.

Cuando se inició la marcha, al frente de la columna fueron situados 2 mil hombres del Campamento Sur, para despejar la nieve del camino, para los 8 mil que los seguían.